¿Existe vida y seres extraterrestres?La humanidad, desde sus albores, ha tenido interés por la vida extraterrestre y quienes en un principio se ocuparon de este tema, fueron los filósofos. Platón (428-347 a. C.), especulando sobre el ‘creador del universo’, decía que ese hacedor había debido distribuir almas en números iguales en las estrellas y asignado un alma por cada estrella.
Para considerar la existencia de organismos vivientes por fuera de la Tierra, es pertinente preguntarnos si la biología es la única ciencia apropiada para identificar la vida o si es posible que exista vida de una forma diferente a como la concebimos en nuestro planeta. Si la biología tiene validez universal, entonces sería razonable extrapolar la teoría del ascenso desde el polvo estelar hasta el origen de la vida y su evolución, hasta organismos dotados de un cerebro —tal como somos nosotros— a otros sistemas solares. Así que estos organismos vivientes serían capaces de comunicarse entre ellos mismos, usando una tecnología similar.
Los físicos Giuseppe Cocconi y Philip Morrison, de la universidad de Cornell, escribieron el 19 de septiembre de 1959 un artículo titulado: “En busca de comunicaciones interestelares”, en el que invitaban a los radioastrónomos a buscar mensajes de radio procedentes de civilizaciones alienígenas. Aunque los autores aceptaban que sus ideas eran pura especulación, concluían que “la probabilidad de éxito es difícil de estimar, pero si no buscamos, la probabilidad de éxito será cero”.
Al año siguiente, el astrónomo Frank Drake, aceptó el reto. Él utilizó un radiotelescopio de Virginia Occidental para buscar señales de radio, y de su esfuerzo surgió el programa internacional Seti (siglas inglesas de Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre). Desde 1960 una legión de astrónomos barre el firmamento tratando de encontrar alguna señal que indique la posibilidad de que no estemos solos en el universo.
Planetas parecidos a la Tierra
Para hacer un balance del programa Seti —en sus 50 años de existencia y homenajear a Drake— en 2011 Paul Davies escribió el libro: “Un silencio inquietante. La nueva búsqueda de inteligencia extraterrestre”. Él es un físico inglés que ha investigado en cosmología y teoría cuántica de campos. Es un gran divulgador de la ciencia. Este texto me ha servido de apoyo para escribir esta nota periodística.
De acuerdo con los resultados estadísticos obtenidos, más del 5 por ciento de las estrellas de tipo solar debería albergar planetas masivos, y una fracción mucho mayor, podría albergar planetas más pequeños que han escapado, por ahora, a su detección. De estos resultados, se infiere que el número de planetas de todo tipo en nuestra galaxia debe ser del orden de mil millones y un número significativo de ellos podrían ser similares a la Tierra, con la posibilidad de albergar seres vivos, parecidos o diferentes a los que han evolucionado en nuestro planeta.
Ya se han detectado más de mil planetas en nuestra galaxia y también se han descubierto planetas por fuera de la Vía Láctea y aunque hay agua en Marte, líquido vital para la vida según nuestra concepción, podría también haberla en los otros planetas conocidos y recién descubiertos.
Para que en un planeta surja la vida, tal como la conocemos, debe darse ciertas condiciones: 1- Que se encuentre a una distancia de la estrella tal que la temperatura en la superficie permita la existencia de agua líquida. 2- Un tamaño entre 0.8 y 2.2 veces el radio de la Tierra. 3- Concentración de CO2 en la atmósfera para evitar el efecto invernadero. 4- Que el planeta tenga una edad de varios miles de millones de años, para que la evolución haya tenido tiempo suficiente como para crear seres vivos.
Además de las condiciones iniciales hay que conocer los procesos que permitieron la formación de la vida en la Tierra y en este campo todavía hay preguntas por resolver. Es difícil calcular la probabilidad de formación de la vida en otros planetas. Y es más difícil aún calcular la probabilidad de que existan extraterrestres.
El enfoque que ha seguido el proyecto Seti, parte del supuesto de que hay civilizaciones extraterrestres que dirigen hacia la Tierra mensajes de radio y como la velocidad de la luz es un límite en la naturaleza esto tiene implicaciones. Imaginemos, como dice Davies, que una civilización alienígena situada a mil años luz de distancia (distancia que recorre la luz en un año) tenga una tecnología tan potente como para poder observar la Tierra con todo detalle. ¿Saben que verían? desde luego que no verían a la Tierra tal como está hoy; verán nuestro planeta alrededor del año 1010 de nuestra era.
En esa época estábamos muy atrasados en tecnología y los alienígenos no pensarían en enviar señales de radio y tendrían que esperar que les llegasen las señales de radio que se le han estado enviando, lo cual tarda unos 900 años más, así que la comunicación, por ahora, es imposible.
Por Diego Arias Serna Doctor en Física, Universidad Complutense de Madrid - Profesor-investigador Universidad del Quindío - Presidente Fundación Semillero Científico (EAM) -
darias@fis.ucm.es - darias@uniquindio.edu.co
http://www.cronicadelquindio.com/noticia-completa-titulo-_existe_vida_y_seres_extraterrestres__-seccion-general-nota-52391.htm